Marchamos éste fin de semana para ver la berrea, a la zona de Pena Trevinca, un enorme coto de caza que hay en A Veiga. Pero la ausencia de lluvias ha retrasado el celo y si bien por la noche tuvimos un fantástico espectáculo, en lo alto de la Morteira, haciendo queimada bajo la luna llena, oyendo los ciervos berrear, ver, no los vimos. La lluvia genera que el olor de las hembras sea más fuerte y se disemine por la zona a través del lodo en que se revuelcan, lodo que los machos marcan orinando y generando una suerte de propiedad territorial, que se pone a prueba en la lucha con otros machos.
Pero al seguir viviendo ésta suerte de final de verano sin lluvias, bastante largo, la ceremonia que normalmente tiene su auge en el último fin de semana de septiembre, se ve postergada unos días. Ya que estábamos por alli, aprovechamos para hacer una pequeña ruta, aunque mi fascitis plantar aún me lleva cojeando. Hubiéramos querido coronar Trevinca (una tormenta nos dejó a pocos metros el otro año) pero la prudencia aconsejó hacer una ruta que en ésta época del año es preciosa.
La Ruta de las Lagunas es ideal para otoño o primavera, ya que en verano el sol la hace pesada y la nieve en invierno, la deja sin señales. Son 14 km con un desnivel de 600 metros, que se hace de manera placentera, en un entorno de alta montaña en el que se sube a 1567 m.
Hay una serie de arroyos y corrientes de agua que cambian el paisaje constantemente. La riqueza de flora y fauna hace que la ruta sea preciosa. El bosque ya celebra setas de todo tipo.
Todo el recorrido de la ruta se encuentra dentro de una serie de protecciones: Red Natura 2000, Espacio Natural Protegido y Lugar de Interés Comunitario.
Laceira
Dentro de la ruta encontramos tres lagunas glaciares, Ocelo (donde se rodó Pradolongo), Carrizais y Laceira. Instalar alli un hyde puede llegar a dar maravillas, en las orillas hay huellas de todo.
Carrizais. Para mí la laguna más bonita
Con el sol de frente se hizo lo que se pudo para la foto ;)
Una ruta muy recomendable. Nosotros, por consejo de Carlos en el Hotel El Ciervo (donde empieza la ruta) la hicimos al revés de lo que marca el mapa, y la verdad que es mucho más atractiva, ya que si se sube primero, hacia Ocelo, nos encontramos con un tramo largo, bastante monótono, solo de subida. En cambio, comenzar por los bosques, ver Acebedo y A Morteira y luego las lagunas, hace que el descenso sea más llevadero. El Maluro y Pena Trevinca están siempre a la vista.
En ruta
Ocelo, algo así como el ojo de la montaña
Bajando, la montaña a la izquierda, el coto a la derecha, perfectamente cercado. 2000 hectáreas protegidas
Lepiotas hasta en los toxos!
Otro lagartito para la colección
La Asociación de Micólogos que andaban por el bosque cogieron varias cestas más llenas que ésta
Mapa de la ruta. Nosotros comenzamos la ruta por la derecha, no por la izquierda