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La avoceta ( Recurvirostra avosetta ), elegante y distinguida

De nuevo, como un baúl interminable de regalos alados, las Salinas de San Pedro del Pinatar acogen infinitos tributos al visitante. No más de unos 200 metros de la entrada de este emblemático parque natural del litoral murciano, sin esquivos movimientos y paz manifiesta se encontraba un ávido y activo grupo de avocetas (Recurvirostra avosetta).Recorriendo las aguas someras y rosadas en busca de multitud de crustáceos daban la impresión de un grupo orquestado marcial y seguro de sí mismo.

En la avoceta destaca sobremanera, inconfundible, sus colores blancos contrastando con las manchas negras que cubren las plumas cobertoras alares y parte de las primarias. Son pocas  las aves que pueden llegar a  confundirse con la avoceta. Suele ir acompañada en por cigueñelas y otras aves limícolas que coinciden en la alimentación.

Avoceta

Al contrario de los numerosos flamencos vestidos de rosa, el pico de la avoceta se curva hacia abajo, es una adaptación al tipo de alimentación.Con suaves vaivenes desplaza el pico removiendo las aguas y atrapando crustáceos y anélidos, no filtra el agua como si lo hacen los flamencos.

Un grupo activo de avocetas en las Salinas de San Pedro del Pinatar

Se distribuye tanto por los humedales de interior como litorales.Se agrupa en colonias de 15 a 30 ejemplares, este comportamiento social les permite defender a su descendencia con eficacia ante sus posibles depredadores para ello, demuestran una especial agresividad que les sirve para ahuyentar a gaviotas.

En la avoceta destaca sobremanera, inconfundible, sus colores blancos contrastando con las manchas negras que cubren las plumas cobertoras alares y parte de las primarias

Estas fotografías son el resultado de una bonita jornada ornitológica por las Salinas de San Pedro.

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