Criaturas Aladas VII: Callophrys rubi

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Los templados días de invierno se esfuman, y su vacío es ocupado por el infatigable movimiento de unas criaturas aladas, sus flamantes vestimentas las convierten en singulares y su verde colorido las confunde en un océano florido de tomillos y romeros. Ellas son la magia y con su vuelo adulan al viento, y con su inquietud calman el fervor de los días primaverales. Callophrys rubi como una joya alada brilla y reclama un tiempo de esperanza y alegría.

El autor de la foto Jordi Dalmau nos muestra la belleza de este bonito lepidóptero.


No son precisamente fríos los últimos días de febrero en el piso termomediterráneo. Recordemos que los pisos bioclimáticos definen alguna característica climatológica, en nuestro caso la temperatura. Callophrys rubi, un lepidóptero perteneciente a la familia de los Licénidos prefiere un régimen de temperaturas con inviernos suaves y veranos calurosos, e inverna en estado de crisálida ocultas entre la vegetación.


Dorycnium pentaphyllum, una de las plantas  que llaman la atención de Callophrys rubi.

A nuestra protagonista le gustan los campos donde el sol reluce y brilla como un meteoro. Callophrys rubi siente predilección por lugares libres de heladas y no osa despreciar las virtudes de este tipo de terrenos cercanos al mar. Limita su existencia y desarrolla su ciclo biológico en los meses que van desde Febrero hasta Mayo. A veces se presenta en pequeñas colonias, y es muy común verla revolotear como una cometa en tríos y cuartetos.

Anatómicamente su descripción es sencilla, una envergadura alar que ronda de los 20-30mm.El macho de la especie presenta en el anverso  de las alas un color ocre-rojizo, mientras el reverso de las alas es de color verde vivo, gracias a su mimetismo se confunde con la vegetación perfectamente, pasando desapercibida para sus posibles depredadores. Inverna, como hemos dicho anteriormente en estado de crisálida, y a finales de Febrero tiene lugar la primera y única generación, en otros lugares no es muy abundante , pero en las zonas cercanas  a la ciudad de Murcia es regular su presencia entre el ralo matorral formado por tomillos, romeros y albaidas.

Anthyllis cytisoides en plena floración en contraste con el mar.

Con la astucia de  un felino y la suerte, siempre  bienvenida, tuve el gozo de grabarla en plena acción. Durante unos eternos minutos se dedico con delicados movimientos a saciar sus necesidades alimenticias por medio de su evolucionada espiritrompa. Disfruten de este pequeño video, gracias Vicente, gracias AXENA.

6 Comentarios

  1. El vídeo tiene un toque profesional, chicos estáis que os salís. Domingo gracias a ti ahora me fijo más en estos seres que antes pasaban desapercibidos.

  2. Javi, gracias…pero el que esta que se sale es Vicente, menudo montaje y que video más bonito…

  3. A mi me encanta leer las historias y curiosidades de esta pequeña fauna que, la mayoría de las veces, nos pasa totalmente desapercibida.

    Muy bueno el documental y muy buena la música. Al verlo parecía que en cualquier momento saldría una voz diciendo: «Queridos amigos de la fauna ibérica…»

  4. Si, cierto, están que se salen.
    Gracias por compartir y crear este espacio para que nos ilustremos y cada día nos fijemos más en el entorno que nos rodea y nos impregnemos con la energia de la naturaleza.

  5. Gracias a ambos,Gatorpardo y Murcia.Seguiremos intentando mejorar para que todos podamos disfrutar de lo que nos ofrece la natulareza.

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