La robótica basada en inteligencia artificial no nos deja de sorprender cada día. En este proyecto, el Swarmanoid, se pretende la utilización de pequeños robots autónomos para realizar un trabajo colaborativo. Esta tecnología pretende imitar los comportamientos como los de los insectos sociales, como hormigas o abejas, en las que la distribución de las tareas está altamente definida y la comunicación directa entre individuos es muy eficaz para la consecución de los objetivos. Amén de la descentralización de todo esto. En el vídeo se muestra el proyecto de unos pequeños robots exploradores que son capaces de coger un libro de una estantería gracias a su trabajo cooperativo. Me quedo con la boca abierta, me recuerdan a R2D2… Existe un reparto de tareas entre ellos desde la exploración del entorno e identificación del objetivo, hasta la comunicación de esta información y posterior trabajo en equipo de robots escaladores con pinzas mecánicas para «capturar» el libro. De hecho, distinguen tres tipos de robots: los «eyes-bots» (vuelan y «observan» el entorno), los «hand-bots» (escalan y cogen cosas) y los «foot-bots» (se desplazan y transportan elementos, incluidos otros robots). No os lo perdáis.
Esquema básico de un robot «hand-bot».
El proyecto Swarmanoid está dirigido por Marco Dorigo y financiado por la UE, y en la actualidad ya ha ganado varios premios de robótica.
