Galicia, una tierra soñada

Allí en lo alto de la tarima de roble pasea el señor magisterio de su palabra. Alumnos somnolientos se disponen con sus uniformes colegiales y así comienza  su discurso… “desde las béticas hasta el sistema central pasando por el río Duero y así llegaremos finalmente al macizo galaico, morada del lobo ibérico. Con sus rías abiertas al señor de azulones tonos, tierra de cultura ancestral, hogar venerado por los hombres del mar y país de lenguaje musical. Os presento la tierra soñada por poetas y trovadores….Galicia».

Mapa geográfico de la Península Ibérica

Capaz de seducir la imaginación de un niño sentado en una renqueante silla y ahora protagonista de sueños pintorescos… ¿Cómo será esta tierra señorial?

Sus colinas de mediana altitud se distinguen por sus sotos y cultivos. Hombres y mujeres con esmerado mimo aprovechan los recursos; los maizales se descubren como un mar de tonos anaranjados, los tomates de temporada se combinan con los pimientos de Padrón, las judías verdes se escogen entre las más selectas  y los calabacines, las patatas, los ajos tiernos, las cebolletas… no tendrán nada que envidiar a la mejor huerta murciana.

La flor de Digitalis purpurea tan hermosa como misteriosa

Rodeado de un  bonito jardín casi confundido con un entorno decorado por la maravillosa planta llamada digitalis… aparecen sus viviendas sin verjas, ni rejas.

Hortensias repartidas en los porches de una perfecta arquitectura al pie de galerías de cristal y tejados a dos aguas.

Dos queridos gallegos a los pies de un magnífico ejemplar de eucalipto.

¿Sus bosques y plantaciones? Eucaliptos de más de 50 pies, pinos marítimos rectilíneos hasta el final de su copa espesa y carballedas relícticas refugio de algún que otro pico menor. Emanando de la roca silícea multitud de manantiales de agua cristalina encargada de socavar y cuartear el granito de las cuevas del folón (Vigo).

Me emociono al recordar su cascada subterránea de más de 5 metros de altura, al entrar en contacto con la surgencia y la oscuridad todo parece volver a tener sentido…fusiono mi corazón con el de la  madre tierra y ya me cuesta pensar que existe algo más ahí fuera, excepto el siempre ameno vuelo del ratonero común.

Ratonero común en vuelo.

Y que rapaz señores… en el Sur no es tan abundante, en esta tierra de pescadores los ratoneros aparecen siempre tres o cuatro veces al día y se colocan en lo alto de los pequeños bosquetes gritando lastimeramente como haciéndose oír ante el potente oleaje del océano atlántico.

Panorámica de la Bahía de A Pobra do Caramiñal.

De la ría de Vigo a la península de Barbanza, bastiones fortaleza de vida y origen de amores enfrentados entre alimañeros y conservacionistas.
Rías protegidas de los crueles temporales invernales por el destino de islas de leyenda como las Cíes o las Ons. El mar aquí es generoso y responde regalando multitud de especies tales como nécoras, centollos, almejas, mejillones, vieras, navajas…

Arrendajo » El guardián del bosque»

Hombre natural como el gallego, iglesia románica y pazo custodiado, pocillo caldeado por aromáticas hierbas, danzas y gaitas, minas de wolframio olvidado, arroyo silenciado por el sonido del arrendajo, monumento al druida y cuarzo rosado, mostradme por última vez a mi bella señora de ojos jaspeados… Galicia
Algún día un hombre del sur te devolverá todo lo que ha recibido, hasta entonces…. gracias.