Los Bloggers de Axena

Etna, una fragua en reposo


Vista del cráter central del Etna desde la última explanada de subida a 2900 m

Al entrar a Sicilia por Messina, lo primero que hice fue otear el horizonte, pero no fue hasta cerca de Taormina que no le vi la silueta, perdida entre nubes. El Etna,la fragua de los dioses, estaba frente a mi. Con el correr de los días fui entendiendo que para ver esa silueta clara y azulada de las fotografías, hay que mirarlo por la mañana, porque a lo largo del día son tantas las emanaciones, que se generan nubes expesas alrededor que hacen dificil visualizarlo.

El Etna es uno de los volcanes más activos del mundo, y está casi en constante erupción. Aunque en ocasiones puede ser muy destructivo, no está contemplado como un volcán particularmente peligroso y miles de personas viven en sus alrededores e incluso en sus faldas. La fertilidad de la tierra volcánica hace que la agricultura extensiva, con viñas y huertos, se extiende a lo largo de las laderas de la montaña. Las erupciones del Etna no son todas iguales. Algunas ocurren en la cumbre, donde hoy día hay cuatro cráteres distintos: el Cráter Noreste, la Vorágine, la Bocca Nuova y el Cráter Sureste. Otras suceden en los flancos, donde existen más de 300 ventilaciones, variando su tamaño desde pequeños hoyos en el suelo a grandes cráteres de cientos de metros de diámetro. Las erupciones en la cumbre pueden ser muy explosivas y extremadamente espectaculares, aunque rara vez amenazan las áreas habitadas alrededor del volcán. Por el contrario, las erupciones en los flancos pueden ocurrir incluso a unos pocos cientos de metros de altitud, bien en las cercanías o en las mismas áreas pobladas. Numerosos pueblos y pequeñas ciudades yacen cerca o sobre los conos de antiguas erupciones laterales. Desde el año 1600 DC ha habido al menos 60 erupciones laterales e incontables erupciones en la cumbre. Casi la mitad de éstas ha ocurrido desde el comienzo del siglo XX y el 3er milenio ha visto cuatro erupciones laterales, hasta ahora: en 2001, 2002-2003, 2004-2005 y 2008.Entre 2002 y 2003, la más grande serie de erupciones en muchos años lanzó una enorme columna de cenizas que podía verse fácilmente desde el espacio y desde lugares tan lejanos como Libia a 600 km, Mar Mediterráneo mediante. La actividad sísmica de esta erupción provocó un deslizamiento de hasta dos metros en la cara Este del volcán y muchas casas en sus flancos experimentaron daño estructural.

Además, la erupción destruyó completamente la estación turística de Piano Provenzana, en el flanco Noreste así como parte de la estación cercana al Rifugio Sapienza en el flanco Sur, y el centro de vigilancia al pie del cráter central.

El Rifugio Sapienza se encuentra en las cercanías del la estación de funicular anteriormente destruida en la erupción de 1983, que ha sido reconstruida.

De Catania se toma la direccion de Nicolosi, el ultimo pueblo antes de entrar en el parque y en la zona de coladas de lava más recientes, de 1984- 2001.

Al subir la carretera, sobrecoge ver los ríos de lava, entre el bosque verde y los restos de casas. No imaginábamos que la lava podía estar presente a tantos km.


En una menos de una hora se llega al Refugio Sapienza del Club Alpino Italiano y al área de esqui; esta carretera continuaba despues a media ladera hacia el famoso valle del Bove, (lugar de las mas impresionantes erupciones y la famosa cascada de lava) pero fue cortada por la ultima erupcion de verano de 2001 y aún no ha sido totalmente reconstruida.

Una vez en el refugio Sapienza, a 1910m de altitud se puede subir al monte andando o en funicular. La caseta de los guías alpinistas ofrece una excursión que incluye el funicular y luego la ascensión al cráter principal, al que solo se accede con guías (o por lo menos es lo que dicen) Debido a que aun ando con la muleta a cuestas, no nos atrevemos a la caminata de seis horas, que incluye una bajada por varios cráteres menores.

La subida se puede hacer sin prisas, de hecho al bajar del funicular no cogimos inmediatamente los camiones ya que nos apetecía dar un paseo por la última ladera que aun conserva algo de vegetación. Hacia arriba, todo es negro y gris, con pinceladas rojas y una bruma que hace ver espejos sobre la nube de polvo que se levanta al caminar.
No es nada sencillo andar pisando la lava que se desgrana.
Hay letreros que invitan a subir por las rutas señalizadas y no a los lados del camino por donde los camiones levantan una polvareda inmensa, pero por mas que miramos, las señales no se ven y los caminos tampoco.
Aun no son las 10 de la mañana y no se puede soportar el sol que encandila. Sin embargo un grupo de japonesas de falda y lazos trota como si fuera una pradera.

Para tener una idea del tamaño de éste cráter, basta mirar los puntitos arriba, son personas.

Subimos en los autocares y a 2800 metros un guía nos explica la actividad del volcán. Nos tranquiliza saber que suele tener actividad «de la gorda» cada año y que la última fue en julio de 2009. Instintivamente todos calculamos a que fecha de agosto estamos.

Luego de circunvalar uno de los cráteres mas grandes que hay en la base del cono, nos internamos por las rutas que ahora si son mas claras.

La vista es espectacular. Si rascas un poco el suelo, no mucho, 5 o 10 cm, la tierra arde. El vapor que vemos salir está como mínimo a 80º. El aire huele a azufre.
Se entiende que utilizaran éstas imágenes para uno de los planetas de Star War.


El cráter superior tiene una corona de mas de cien metros de largo, de azufre


Por ésta ladera está prohibido subir, las emanaciones son altamente tóxicas y hay días que prácticamente no se puede respirar.


El cielo se cubre y descubre de nubes por antojo de las fumarolas.

Lo increíbe es la cantidad de riqueza que da ésta tierra volcánica, generadora de unas vides que dan un vino único y de los tomates mas ricos que tengo comido jamás.

Vista desde el funicular

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