La Navidad es típicamente época de excesos. Para combatir esa tendencia, nosotros no nos excederemos demasiado en el número de publicaciones. Así que, como habitualmente cuando nos vamos de vacaciones, bajaremos el ritmo a un par de entradas por semana.
Al fin y al cabo, esta época no tiene por qué ser tan frenética. También puede ser más relajada. Eso sí, sin perder la oportunidad de hacer una cena navideña con los amigos. Y ¿qué mejor momento para pararse a reflexionar sobre lo que nos ha dado este último año?
Esperamos que disfrutéis mucho y bien de estas fiestas. Gracias y ¡feliz Navidad!