Si en un acuario ponemos pulpos y tiburones, en principio pensaríamos que los que tienen las de perder son los pulpos. Y eso es lo que debieron pensar los que colocaron un pulpo gigante del pacífico en un acuario con tiburones.El problema fue que de repente empezaron a suceder desapariciones misteriosas. Cada noche uno de los tiburones desaparecía como por arte de magia y nadie se explicaba por qué. Hasta que se decidieron a colocar cámaras para ver lo que pasaba. Y esto es lo que obtuvieron:
¡Impresionantes las imágenes!