La gran masa forestal se caracteriza por la pobre diversidad de especies; tan sólo el pino, el abeto y el abedul gozan de ostentosa presencia. La fauna acorde con estos lugares no es muy variada pero se puede caracterizar brevemente resaltando la presencia del oso, de los alces, de los cisnes y gran variedad de truchas y otras especies de peces en sus lagos y ríos.
Finlandia consta de 19 parques naturales, en los cuales la circulación y presencia humana está restringida, y 35 parques nacionales destinados a la investigación, la docencia y el recreo. Pero lo que no nos cabe duda es que todo el país es como un gran parque natural y lo anormal es encontrarse con ciudades.
En todo caso Finlandia es un país para los que gustan de placeres simples, quizás se pueda cometer el pecado de la monotonía, sí, pero al final sólo peca el que quiere. Mi sugerencia para una jornada en la naturaleza sería la de realizar una ruta que combinase el uso del kayak con un paseo con los bastones a través del bosque o mediante la práctica de un deporte muy seguido en escandinavia, las carreras de orientación.
Y para los más exigentes, se puede aprovechar más el día o la noche en su caso, ya sea una velada de música del país, ya sea escuchando clásicos como «Tümmat Silmät, ruskea tukka» (ojos oscuros, pelo castaño) o el hardrock de Lordi o tomando una buen tazón de leche de reno con cacao y buscando la aurorea boreal en los cielos estrellados del hogar de Youlupuki (que así es como le llaman a Santa Claus) y sentirnos como en otro mundo.